Los hospitales siempre han sido un escenario escalofriante, en donde las personas que estuvieron ahí sufrieron, pero ahora nos toca ubicarnos en españa, en donde un lugar tan grande y frío puede inspirar las más terribles pesadillas.
En los alrededores del hospital tenemos varios lugares abiertos donde aún es posible la entrada, además de una iglesia que se encuentra en ruinas y los jardines del propio hospital, lugar que te pone los pelos de punta y donde hubo numerosos suicidios años atrás cuando el hospital se encontraba en pleno funcionamiento.
Los internos que habían en el antiguo hospital del Tórax de Terrassa provenían de las distintas comunidades autónomas, ya que el hospital pertenecía al Ministerio de sanidad.
La lejanía parecía influir en el estado anímico de la mayoría de pacientes que se sentían abandonados por sus familiares ya que la distancia en ocasiones era mucha y la mayoría de ellos no podía dejar su trabajo ni su vida cotidiana para estar al lado de sus familiares enfermos, lo que para muchos internos suponía un estado anímico depresivo que añadido a su estado físico de salud que en ocasiones era terminal, les iniciativa al suicidio.
En los alrededores del hospital tenemos varios lugares abiertos donde aún es posible la entrada, además de una iglesia que se encuentra en ruinas y los jardines del propio hospital, lugar que te pone los pelos de punta y donde hubo numerosos suicidios años atrás cuando el hospital se encontraba en pleno funcionamiento.
Los internos que habían en el antiguo hospital del Tórax de Terrassa provenían de las distintas comunidades autónomas, ya que el hospital pertenecía al Ministerio de sanidad.
La lejanía parecía influir en el estado anímico de la mayoría de pacientes que se sentían abandonados por sus familiares ya que la distancia en ocasiones era mucha y la mayoría de ellos no podía dejar su trabajo ni su vida cotidiana para estar al lado de sus familiares enfermos, lo que para muchos internos suponía un estado anímico depresivo que añadido a su estado físico de salud que en ocasiones era terminal, les iniciativa al suicidio.
Eran demasiado habituales los suicidios en el hospital, superando con creces las estadísticas de cualquier otro centro sanitario de la época.
Los internos se lanzaban al vacío desde las ventanas de las últimas plantas, cayendo en el jardín trasero del hospital, el cual habían apodado "la jungla" debido a los gritos que se solían escuchar de la gente que se suicidaba y los de aquellos internos que gritaban frases como "ya ha caído otro" u "otro que se a tirado"
Actualmente el hospital se encuentra en su mayor parte cerrado, a la espera de las obras que en breve comenzarán, solo está activo una parte donde la productora Filmax hace los rodajes de algunas películas y otra ala, donde se encuentra la residencia para disminuidos psíquicos profundos "La Pineda" que pertenece a la Generalitat de Cataluña y tiene capacidad para 62 plazas resindenciales.
Actualmente los rumores sobre sucesos extraños en el interior del hospital y en sus alrededores son bastante comunes por parte de aquellas personas que acuden a este antiguo hospital, bien sea por asuntos de trabajo o por simple curiosidad, ya que la leyenda forjada sobre el lugar es cada día más conocida fuera de Cataluña.
Algunas de las personas que aseguran haber experimentado situaciones extrañas dentro del hospital son actores y gente relacionada con el mundo del cine.
También algunos empleados aseguran escuchar voces y ruidos que parecen provenir de la parte abandonada del antiguo hospital y como no, aquellas personas que se acercan hasta sus muros para realizar pruebas de tipo psicofónicas o simplemente curiosear en el lugar.
En el antiguo hospital se han rodado escenas de varias películas entre ellas 'The Machinist' , "Fragiles", "Ouija" o "Los sin nombres"
Brad Anderson, director de la película "The Machinist", la cual se rodó íntegramente en el hospital del Tórax, asegura que es un lugar espeluznante.
3 comentarios:
Que lugar tan apropiado para el misterio y la trama oscura. Siempre pense que los hospitales se prestaban a ello, mas si son abandonados. Yo soy estudiante de medicina, y creeme que lo que he conocido no es menos tranquilizador que lo que mi retorcida mente puede imaginar, el sotano de anatomia patologica de mi hospital no necesita a Vincent Price de portero para ser aterrador... Y ni menciono la vieja Faculrad de Medicina de Montevideo y sus salas de anatomia. Te felicito por el blog, esta muy bueno. Saludos!!!
Gracias por el aporte Mr. Dupin, con solo tu descripción hará q nadie quiera visitar un hospital, la verdad es q me dan más miedo q los propios cementerios.
tio jo quiero k me salga la historia no que hay en los alrrededores!! :@
Publicar un comentario